Tras el ataque del presidente de Estados Unidos Donald Trump a Amazon por twitter, las acciones del gigante del ecommerce en Wall Street cayeron.
Trump denunciaba a Amazon de aprovecharse de su monopolio en el mercado del comercio electrónico para aplastar a las pequeñas empresas y provocar una grave pérdida de empleo. A las dos horas siguientes del tuit, las acciones de la compañía cayeron un 1,2%. Aunque logró mantenerse el resto de la semana.
El principal punto sobre el que prestan especial atención los analistas, políticos y empresarios estadounidenses es la compra que realizó Amazon de los supermercados Whole Foods. El diputado estadounidense David Cicilline escribió una carta en julio al presidente del comité judicial de la Cámara solicitando una investigación sobre la adquisición de Whole Foods por parte de Amazon, una compra que se realizó por 14.700 millones de dólares. Según el representante, esta unión “ha disminuido los salarios y ha dado lugar a una gran desigualdad en los puestos de trabajo”.
Hay que recordar que Whole Foods es una de las cadenas más grandes del sector del eco food y que vende más de un billón de dólares al año y es uno de los nombres más conocidos en el mercado minorista de EEUU.
La ley antimonopolio estadounidense se centra ahora en Amazon. La empresa se ha ido haciendo cada vez mayor a través de la venta de productos más baratos e innovadores que los de sus competidores. Es decir, que se ha hecho lo que la ley antimonopolio dice que las empresas deben hacer: competir en precio y calidad. Por lo que hasta ahora las investigaciones no se han centrado en el gigante del ecommerce.
Ahora, los analistas focalizan su atención en la evolución de la ley antitrust o antimonopolioy si es eficaz. Del mismo modo que también se cuestionan las posibles acciones del gobierno estadounidense sobre Amazon y las repercusiones que tendría. En junio, Goldman Sachs emitió una nota a los medios cuestionando si las acciones tecnológicas de Amazon están sobrevaloradas y si los inversionistas han pasado por alto los riesgos asociados con las posibles cuestiones regulatorias del gobierno.
Sin embargo, las acciones de Amazon han ganado un 34% este año, subiendo a 1.003 dólares a en Nueva York. Expertos y analistas han rechazado en gran medida las amenazas antimonopolio para el minorista online más grande del mundo porque la compañía no tiene gran concentración de mercado en ninguna categoría de producto y tiene un historial de ayudar a mantener los precios bajos para los compradores. Una cuestión legal clave es si Amazon, con sede en Seattle, ha crecido hasta el punto de desalentar la innovación de los competidores.