El tijeretazo en Correos en los Presupuestos Generales de este año, que ha pasado de los 180 millones de euros en 2016 a 120 millones en 2017 podría provocar una reducción de plantilla en la compañía. El sindicato CCOO se ha reunido con el Ministerio de Fomento, quien ha garantizado la financiación del Servicio Postal Universal de Correos.
Los sindicatos de UGT y CCOO ya han denunciado que este recorte afectará gravemente a Correos aunque el Gobierno, a través del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha asegurado que no afectaría a los trabajadores.
Para ello, el ministro se ha reunido con los sindicatos con el compromiso de garantizar la financiación del Servicio Postal Universal y la creación del Plan de Prestación en el plazo de un año.
Para la creación del Plan, el ministerio creará un grupo de trabajo, comenzando en dos semana la primera mesa de trabajo. En ella estarán el ministerio de Hacienda, Fomento, Correos y la CNMC. Tras la redacción del Plan, se remitirá a Bruselas donde se revisará y dará su aprobación.
Si no se cumpliera los compromisos del Gobierno, los recortes provocarán que los municipios pequeños serán los más afectados por este recorte, aunque también se notará en las ciudades. El recorte se traduce en unos 5.000 puestos de trabajo menos en toda España, además de los puestos eventuales y sustituciones. La principal consecuencia afectaría al tiempo de entrega de paquetes, principalmente por correo ordinario, ya que tendría que dejar de repartirse los cinco días laborales de la semana.
El responsable del Sector de Entidades Públicas Estatales del CSIF, Manuel González, ya ha advertido que “puede ocurrir que los ciudadanos de los núcleos rurales tengan que trasladarse a otros más grandes a recoger el correo”. Por otra parte, algunas oficinas también podrían cerrar, o la reducción de horarios de atención al público.